El Grupo Biolid, que concluyó a principios de año, la integración de Industrias Gráficas Marcal, está incorporando nuevos equipos tanto a la fábrica de Basauri donde opera esta última como a sus propias instalaciones centrales de Zamudio. Un proyecto cuyas inversiones se valoran en torno a los 350.000 €.
En concreto, el objetivo de mejorar la productividad, la gestión del color y alcanzar una nueva excelencia en la calidad de las etiquetas, he llevado al grupo a instalar en su centro de Basauri un equipo ‘Accurio Press C14000’, de Konica Minolta. Esta impresora de tóner de alto volumen, lanzada al mercado mundialmente a finales de 2019, imprime a 140 páginas por minuto (ppm) en A4 y es un 40% más rápida que cualquier otro dispositivo a base de tóner de Konica Minolta. Para la multinacional, “este sistema de impresión ayuda a los clientes que desean expandir y optimizar sus negocios a través de la automatización avanzada y la consecución de una mayor productividad con efectos tangibles que conducen a una mayor producción de alta calidad con menos desperdicio”.
Al mismo tiempo, Grupo Biolid ha optado por reforzar su fábrica de Zamudio con la incorporación de la nueva selladora de sleeves ‘K2-plus‘ del fabricante canadiense Karlville, líder mundial en este tipo de equipos. Precisamente, a principios de año Guillermo Buces, CEO de Biolid, apuntaba a los sleeves y las etiquetas RFID como dos de sus apuestas de futuro. Y añade ahora, “tenemos puestas muchas y muy buenas Etiquetas expectativas en la fabricación de este tipo de producto, en el que ya trabajamos de manera muy significativa“. Además, añade Buces, la ‘K2-plus‘ recientemente adquirida es “susceptible de ser ampliada en un futuro” y “va a permitir al grupo ganar en productividad y calidad de los sleeves fabricados”.
APOSTANDO POR LA DIVERSIFICACIÓN Y LA EXPORTACIÓN
Grupo Biolid, suma una plantilla de más de 70 personas y una superficie construida de unos 6.000 m2 entre sus dos centros de producción, con una cifra de negocio en 2019 de 8,5 M€, en torno al 20% procedente de las exportaciones. ¿Y cómo está viviendo la compañía el complejo ejercicio en curso? “La evolución de nuestra carga de trabajo ha ido cambiando a lo largo de estos meses de pandemia“, explica su director general. “Empezamos con una carga de trabajo muy fuerte, sobre todo en lo referente a etiquetas para los sectores de alimentación y limpieza, trabajando 24 horas al día sin descanso“. Sectores como industria, automoción y vino, tanto nacional como internacionalmente “se han parado de manera estremecedora“, si bien Grupo Biolid alude a la diversificación y su posicionamiento en exportación como dos de sus puntos fuertes.
En cuanto a las previsiones para lo que queda de año, no son positivas, ni para la industria siderúrgica, ni para la automoción (si bien en este caso con un tímido arranque) ni para las bodegas. Es por ello que Biolid sigue apostando por la diversificación, en sectores y también en mercados y, de hecho, incluso “hemos incorporado una persona para dinamizar las ventas en el mercado francés, donde esperamos tener un crecimiento importante, llegando a establecer allí una red de ventas que abarque todas las zonas interesantes del país“, concluye Buces.
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